Y si mi furia me deja ciega
No me apartes
Duele que el viento te reciba con arena
Que tus palabras se me atragantan en la garganta
Duele preguntarse quién de los dos
ahora tiene ojos de lobo
Me pregunto por qué me dejas caer granizo
Si ya he pasado por el peor de los inviernos
el de tus reproches